Uno no puede atraer lo que no es capaz de resolver.

Hay momentos en los que me pregunto si seré capaz de enfrentar los desafíos que se me presentan actualmente. Esta pregunta surge cada día cuando me enfrento a algo complejo, grande y que requiere una gran cantidad de habilidades, estructura, capacidad y equipo. La mayoría de las veces, recuerdo que los desafíos son oportunidades para crecer y que debo prepararme para abordarlos de la mejor manera posible. También recuerdo que los desafíos llegan cuando estoy preparado y es el momento adecuado.

Este es uno de los principales motivos por los que he trabajado arduamente en mi crecimiento personal, para estar a la altura de las metas que me he propuesto. Cada día me doy cuenta de que esta es la única fórmula que me llevará por el camino correcto, sostenible y duradero, es decir, un camino de alto rendimiento sin afectar mi salud, mi familia y mi estilo de vida.

A veces, deseamos tener mucho éxito, mucho dinero, un gran crecimiento, proyectos importantes, una familia sólida y mucho más. Sin embargo, olvidamos que para lograr todo eso, necesitamos tener una base sólida y una estructura, al menos a nivel mental, profesional y personal, que nos permita enfrentar los desafíos que conllevan esos deseos.

Cuando me enfrento a estos desafíos, me doy cuenta de que hace uno o dos años me habría resultado muy difícil resolverlos. No digo que no debamos soñar o olvidar que todo es posible y que podemos lograr cualquier cosa que nos propongamos. Claro que podemos hacerlo, pero para atraer y lograr esas metas, debemos convertirnos en la persona que pueda atraerlas. Como dijo Jim Rohn, «el éxito es algo que atraes, no algo que persigues».

Es un concepto sencillo y práctico, pero requiere un trabajo diario constante, disciplina, aprendizaje, tareas, estudios, inversión y más. ¿Vale la pena? Cada persona le da el valor que considera a sus metas. Debes establecer metas muy grandes, pero debes ser consciente de que esas metas requieren que te conviertas en una persona a la altura de ellas. Es decir, debes crecer y desarrollarte a niveles muy altos.

Te recomiendo establecer metas muy grandes y luego trabajar para convertirte en la persona que pueda alcanzar esas metas. Aunque al principio no sepas cómo lograrlas, verás cómo poco a poco comenzarán a cumplirse. El camino estará lleno de sorpresas, crecimiento y nuevas metas.

Deja un comentario